Esta obra no cuenta la muerte de mi padre. Pero sí la toma. Me toma a mí atravesando el camino de la muerte de un hombre a quien quise hasta rincones del dolor y el amor que yo misma no comprendo. Qué sabe nadie, papá. Ningú morirà després de mi es una obra de artes vivas resultado de la colaboración entre un arquitecto y una coreógrafa en la que se da vida a un mundo otro, en el que reflexionamos en torno a la perplejidad y nuestra relación con lo extraño. Acercando elementos que no acostumbramos a ver juntos, desplegamos un paisaje de convivencias y afectos, en el que cuerpos y objetos vuelven a aprender a relacionarse entre sí.
Julia Irango y Jorge Nieto vienen de los campos de la danza y la arquitectura. Empiezan a colaborar en Valencia en 2020, desarrollando un trabajo de experimentación sonora, objetual y coreográfica. En sus trabajos ponen a dialogar elementos que no comparten un lenguaje común, navegando la extrañeza amable. ¿Cómo hacer operativa una maquinaria ineficaz y con piezas chirriantes? De este interés se despliega el carácter transdisciplinar y multiformato de sus propuestas. Desde 2020, crean la obra “Ningú morirà després de mi” y la conferencia performativa “Dents i perles” que han sido apoyadas y mostradas en instituciones como el Centro Parraga, la Caldera o el IVAM.