Cheli es el protagonista del primer cuadro de Pupilas pintaban mis sábanas, un proyecto que dibuja las vidas reales de usuarios de heroína en la Barcelona de los años 70-90. Desde los 18 años y hasta ahora, con 62, Cheli ha consumido heroína. Su consumo se inició en los 70, entre la noche de la Barcelona postfranquista y las excursiones de introspección trascendental a la montaña, empujado por el deseo de descubrir un nuevo mundo de libertades que acabaron por empacharlo. El registro sonoro del relato de Cheli se entrelaza en escena con la voz y el cuerpo de Erik, su médico, quien se adentra en el universo de su paciente buscando posibles respuestas a una pregunta: ¿cómo gestionamos el placer y el sufrimiento en la sociedad contemporánea?
Lalínea es un proyecto artístico que centra su atención en los procesos de creación y en las dinámicas que se establecen entre la acción artística y la audiencia. A su vez, trabaja con la realidad como materia prima en un intento por reescribir lo hegemónico. Sus piezas proponen variaciones sobre la conferencia performativa con tal de tratar de forma directa realidades contemporáneas complejas, mientras también explora la poética de lo cotidiano a través de la retórica visual y auditiva para generar experiencias sensoriales particulares.
Lalínea nace el 2019 en Barcelona. Es la compañía residente del Teatre Lliure durante la temporada 20/21 con el proyecto José y la Barcelona disidente, estrenado en el Grec Festival de Barcelona 2021.
